Parece tan fácil o difícil como imagine nuestra mente, además de la adicción física que provoca la nicotina existen poderosas resistencias psicológicas para dejar de fumar como el miedo a sufrir molestias físicas, no saber como ocupar algunos momentos en los que estamos habituados a fumar, etc... cuando en realidad estos momentos resultan placenteros porque están aliviando unos síntomas de abstinencia provocados por el cigarrillo que nos fumamos antes.
Realmente el tabaco no proporciona ningún placer, solo alivia unos síntomas que él mismo ha provocado y que no teníamos antes de fumar el primer cigarrillo de nuestras vidas. El tabaco no ayuda a sobrellevar ningún problema de la vida sino que es un nuevo problema añadido en nuestra vida. Reduce peligrosamente nuestra salud y nuestra esperanza de vida, empeora también la salud de la gente que nos rodea, es un gasto económico inútil, una pérdida de tiempo y, en muchas ocasiones, un hábito muy incómodo (provoca quemaduras, suciedad, malos olores... y a quien no se le ha metido ceniza dentro de los ojos en un día de viento?... divertido...) y además, psicológicamente destructivo ya que va minando la autoestima al sentirnos totalmente dependientes nada menos que de una sustancia.
Hace 4 años y 15 días fumé mi último cigarrillo después de haber intoxicado mi cuerpo durante 23 años de forma absurda, llegado el día propicio y sin saber que ese era el día, reflexioné sobre los pros y los contras, analicé cuidadosamente todas las desventajas sin intentar ignorarlas... intenté también analizar las ventajas pero no había ninguna en realidad. En ese momento decidí que el cigarrillo que estaba entre mis dedos era el último que iba a fumar y así fué. Sabía que habría molestias ya que lo habiá dejado algún breve periodo anteriormente, y también sabía que no debía volver a probar ninguno sino quería volverme adicta de nuevo.
No hablo más de mi caso particular ya que cada persona debe encontrar su motivación propia y su momento adecuado, el momento de su decisión reflexionada. Os dejo con este excelente vídeo que os ayudará en vuestra búsqueda de motivación para liberaros de esta adicción:
Es fácil dejar de fumar si sabes cómo (Método de Allen Carr)
Realmente el tabaco no proporciona ningún placer, solo alivia unos síntomas que él mismo ha provocado y que no teníamos antes de fumar el primer cigarrillo de nuestras vidas. El tabaco no ayuda a sobrellevar ningún problema de la vida sino que es un nuevo problema añadido en nuestra vida. Reduce peligrosamente nuestra salud y nuestra esperanza de vida, empeora también la salud de la gente que nos rodea, es un gasto económico inútil, una pérdida de tiempo y, en muchas ocasiones, un hábito muy incómodo (provoca quemaduras, suciedad, malos olores... y a quien no se le ha metido ceniza dentro de los ojos en un día de viento?... divertido...) y además, psicológicamente destructivo ya que va minando la autoestima al sentirnos totalmente dependientes nada menos que de una sustancia.
Hace 4 años y 15 días fumé mi último cigarrillo después de haber intoxicado mi cuerpo durante 23 años de forma absurda, llegado el día propicio y sin saber que ese era el día, reflexioné sobre los pros y los contras, analicé cuidadosamente todas las desventajas sin intentar ignorarlas... intenté también analizar las ventajas pero no había ninguna en realidad. En ese momento decidí que el cigarrillo que estaba entre mis dedos era el último que iba a fumar y así fué. Sabía que habría molestias ya que lo habiá dejado algún breve periodo anteriormente, y también sabía que no debía volver a probar ninguno sino quería volverme adicta de nuevo.
No hablo más de mi caso particular ya que cada persona debe encontrar su motivación propia y su momento adecuado, el momento de su decisión reflexionada. Os dejo con este excelente vídeo que os ayudará en vuestra búsqueda de motivación para liberaros de esta adicción:
Es fácil dejar de fumar si sabes cómo (Método de Allen Carr)
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